ESTRELLA DE SUPERBIKE: BMW S 1000 RR

La S 1000 RR es la versión apenas menos radical de la M 1000 RR, con la que BMW Motorrad ostenta un bicampeonato consecutivo en el World Superbike. Es por eso que, en esta ocasión, te presentamos a la hiperdeportiva que salió con ventaja ante las mejores del planeta en la máxima categoría de velocidad para motocicletas derivadas de serie.

Con apenas 15 años en el mercado, la historia de la BMW S 1000 RR es lo suficientemente extensa y -últimamente- rica en palmares deportivo. La primera generación del modelo nació en 2010 y, desde entonces, ha sabido evolucionar rápidamente manteniendo una esencia que la ha hecho triunfar en términos comerciales. Los elementos clave en la S 1000 RR han sido desde siempre una elevada potencia con una facilidad de manejo envidiable, ya que nunca requirió que seamos pilotos profesionales para ser verdaderamente rápidos a sus mandos dentro de un circuito de velocidad.

No obstante, esa dualidad no había rendido sus glorias deportivas en la máxima competición, como sí sucedió finalmente en los últimos 2 años con los títulos consecutivos en World Superbike junto al piloto turco Toprak Razgatlioglu, alzando a esta motocicleta a codearse entre las pocas hiperdeportivas de la historia que pueden presumir de un bicampeonato en la categoría.

Los amplios alerones que ejercen una importante función aerodinámica, mientras que la salpicadera M Brake Ducts brinda una óptima refrigeración de los discos de freno.

Es por ello que la más reciente generación de la BMW S 1000 RR es una de las más completas que se hayan construido hasta el momento, derivada directamente de la M 1000 RR del Campeonato Mundial y con las mismas bases de poder brutal y buenos modales a sus mandos que la han caracterizado desde sus inicios.

SUPERIORIDAD TÉCNICA

La nueva S 1000 RR sigue presumiendo de una estructura doble viga de aluminio convenientemente mejorada, y un motor de cuatro cilindros en línea del tipo screamer, esto último significa que posee un orden de encendido regular, optimizando el ascenso de las revoluciones y la potencia a alto régimen. Con esta configuración consigue 210 caballos de fuerza a 13,750 rpm desde sus 999 cc, estando completamente homologada bajo la estricta norma Euro 5+, por lo que además de potente, se trata de un motor muy eficiente.

Por supuesto, las sensaciones de manejo y sonido mecánico son simplemente exquisitos, pudiendo acelerar limpiamente hasta los 100 km/h en 3.21 segundos y alcanzar los 303 km/h de velocidad máxima. Más allá de toda cifra, lo que en verdad sorprende es lo estable y segura que se manifiesta en cualquier condición de manejo, ya sea rodando tranquilamente o “afilando el colmillo” en una conducción más deportiva y dinámica.

Con sólo despojarla de sus accesorios y con unas pocas piezas del catálogo de partes originales, la S 1000 RR puede convertirse en una auténtica máquina de competición.

En esto último, mucho tiene que ver la tecnología pasiva y activa que ha adquirido en su más reciente generación. Desde los amplios alerones frontales que son capaces de brindar hasta 23.1 kilogramos de carga aerodinámica a altas velocidades, hasta los modos de manejo Pro incluidos de serie, que son perfectos para la conducción en circuito. Dicho sea de paso, la función Race Pro permite desactivar asistencias de forma individual como el ABS o el control dinámico de tracción, los cuales no pueden ser intervenidos de la misma forma en el resto de los modos de manejo.

En conjunto con todo esto, otro de los aspectos en los que BMW Motorrad ha puesto especial énfasis para esta nueva S 1000 RR ha sido en reducir el peso lo máximo posible, consiguiendo 198 kilogramos en orden de marcha, lo que significa que se trata de una máquina que mejora la relación peso/potencia ideal de 1 a 1.

El motor cuatro cilindros en posee tecnología ShiftCam de distribución variable, para máximo desempeño a cualquier régimen.

MÁQUINA CIVIL Y DE GUERRA

La BMW S 1000 RR es una máquina de alta competición homologada para el “uso civil”, por así decirlo. Pero sus orígenes de carreras, además de estar basada en la M 1000 RR, quedan de manifiesto en su diseño, calidad de construcción y componentes. Su posición de manejo corresponde a la de una superbike de raza pura, pero no por ello es sacrificada en lo cotidiano, acompañada por una puesta a punto de las suspensiones que ofrece un buen equilibrio entre estabilidad y manejo, ya que con componentes de calidad lejos queda la teoría de que un gran conjunto deportivo debe de ser excesivamente rígido, sino todo lo contrario.

La S 1000 RR prioriza la tracción en una conduccion al limite, lo que -de forma paralela- favorece el manejo fuera del circuito, mientras que en materia de frenos no solo cuenta con componentes de primera línea, sino que además el diseño de la salpicadera delantera con conductos de refrigeración M favorece la disipación del calor generado durante una conducción deportiva.

Para finalizar, es importante destacar los distintos paquetes que BMW Motorrad ofrece para los clientes de la S 1000 RR, desde el estándar que incluye sofisticaciones como las funciones electrónicas Pro, la pantalla TFT de 6.5 pulgadas, la batería de litio, el parabrisas alto y el Brake Slide Assist que funciona como freno de estacionamiento, hasta los mas sofisticados M con ruedas de carbono, Dynamic con suspensiones electrónicas activas, Race con escape Akrapovic y Carbon con tapas de servicio en fibra de carbono, como principales características.

Una máquina de carreras de uso real, derivada de la máquina campeona del mundo de World Superbike a disposición del piloto local que quiere atacar el cronómetro de su circuito favorito sin grandes complicaciones, pero que también es apta para manos expertas y, todo esto, sin perderse en el intento de sus atributos que siempre la hicieron destacar ante el resto, con su característica facilidad de sobrellevar la vida cotidiana en ciudad o carretera.

“Conducir la S 1000 RR, ha sido una experiencia de adrenalina increíble por la velocidad, tecnología y seguridad que te brinda. Cuando estás a sus mandos, sabes muy bien que no estás manejando cualquier motocicleta”. Gibrand Carrera.