Ducati es una marca que ha trascendido la categoría de fabricante, para convertirse en un verdadero ícono. No solo se distingue por su diseño y estética, o por el inconfundible sonido de sus motores, sino también por una innovación que ha marcado su identidad: el sistema de válvulas desmodrómicas. Esta tecnología, única en el mundo de las motocicletas, no solo le ha permitido dominar en competencias internacionales, sino también construir una reputación de exclusividad y aspiración entre los apasionados de las dos ruedas.
Fundada en Bolonia, en 1926, Ducati comenzó fabricando radios y equipos electrónicos, pero fue tras la Segunda Guerra Mundial que se enfocó en las motocicletas. La búsqueda de rendimiento y diferenciación, llevó al ingeniero Fabio Taglioni a desarrollar un sistema de distribución revolucionario: el desmodrómico, estrenando una moto de 125 cc de competición.
En 1960, una Ducati; la 250 GP Desmo, equipada con esta tecnología, logró una victoria en el Gran Premio, demostrando que la innovación funcionaba en pista. A partir de entonces, Ducati convirtió este sistema en parte de su ADN, primero en sus prototipos de carreras y luego en modelos de producción.
En la mayoría de las motocicletas, las válvulas del motor se cierran con la fuerza de un resorte. Ducati cambió la apertura y cierre de la válvula con levas y balancines, eliminando la dependencia del resorte. Este diseño, ofrece precisión absoluta en altas revoluciones, evitando la flotación de la válvula. También tiene un mayor rendimiento, al permitir tiempos de apertura más amplios y estables, aumentando la durabilidad y fiabilidad, ya que no hay resortes sometidos a fatiga. Finalmente, estas modificaciones se traducen en una entrega de potencia más directa y en el sonido inconfundible de un motor Ducati.
Aunque este sistema es más complejo y costoso de fabricar y mantener, se ha convertido en una firma innegociable para la marca, símbolo de su búsqueda constante por la excelencia.
Hoy en día, modelos como la Panigale V4, la Multistrada o la DesertX siguen portando con orgullo esta tecnología que comenzó hace más de medio siglo. Aunque Ducati también ha explorado motores más convencionales en algunas líneas, el desmodrómico continúa siendo sinónimo de lo más puro de la marca.
El sistema de válvulas desmodrómicas es la esencia de Ducati. Representa la unión de historia y tecnología que ha hecho de la marca italiana un referente mundial. En la pista y en la calle, el “desmo” es la prueba de que esta firma no fabrica simplemente motocicletas, crea leyendas sobre ruedas.