Oficialmente se ha anunciado la llegada de una de las motos más esperadas del momento: la nueva Yamaha R9. Se trata de una superdeportiva basada en la plataforma CP3 que promete entregar altas prestaciones y un excelente rendimiento.
Esta moto llega como la respuesta de la firma a la demanda del mercado en este segmento, así como para cumplir con las medidas medioambientales actuales, sobre todo en el mercado europeo. Eso no quita que estemos frente a un modelo deportivo que busca brindar altas dosis de adrenalina a sus usuarios.
Como mencionamos anteriormente, porta el motor tricilíndrico CP3 de 890cc con doble árbol de leves, refrigerado por líquido y 4 válvulas por cilindro. Cuenta con acelerador electrónico con microprocesador YCC-T con una configuración enfocada al rendimiento deportivo. La transmisión final, el avance del encendido y el mapeado de la inyección también están optimizados.
Su chasis tipo Deltabox de aluminio fundido es una estructura ligera de tan solo 9.7 kg que lo convierte en el más ligero que se haya usado en una supersport de Yamaha. Gracias en parte a esto, el conjunto pesa únicamente 195 kg. En su diseño no faltan los detalles inspirados en MotoGP, con líneas horizontales fluidas que aportan una sensación más potente y dinámica.
Incorpora alerones integrados que le dan un aire más agresivo al frente. Se mantiene la toma de aire en forma de M de la gama R y los faros de doble óptica, pero más acentuados. En el apartado de las suspensiones vemos unas KYB de nuevo diseño configuradas especialmente para este modelo.
Delante vemos una horquilla invertida de 43 mm con reguladores individuales para la compresión y extensión, tanto a alta como a baja velocidad. Un detalle es el revestimiento Kashima que oscurece el color dorado/bronce de las barras. El amortiguador trasero es ajustable en precarga, extensión y compresión.
Para el sistema de frenado, en la parte delantera posee pinzas monobloque Brembo Stylema de anclaje radial y 4 pistones con latiguillos de freno metálicos de acero inoxidable y discos de 320 mm. El freno trasero cuenta con un disco de 220 mm. Porta neumáticos Bridgestone Battlax Hypersport RS11, con carácter deportivo pero pensados para un buen rendimiento en carretera.
La altura del asiento es de 830 mm y la posición de manejo es la típica de las motos deportivas, aunque se ajusta fácilmente a los diferentes tipos de conducción. Para tu comodidad en viajes más largos, el depósito de combustible es de 14 litros. Se intentó reducir al máximo la cantidad de botones, pero cuenta con ayudas como el sistema de control de crucero que funciona a partir de 40 km/h en tercera marcha.
También puedes ajustar la velocidad de incrementos o descensos de 1 km/h en un interruptor y cuenta con limitador de velocidad. La unidad inercial IMU de 6 ejes permite disponer de asistencias avanzadas de acuerdo con el modo de conducción elegido: Sport, Street, Rain, dos personalizables y cuatro Track.
Vale la pena mencionar el control de salida para aceleraciones eficaces en pista o la posibilidad de desactivar el ABS trasero, que vienen de serie. Destaca su pantalla TFT de 5” con cuatro temas seleccionables y un modo circuito. Ofrece conectividad mediante la app MyRide. Aunque aún no se conoce su precio, sí sabemos que llegará en dos variedades de color: Icon Blue y Tech Black.