Ducati celebra los 30 años de su Monster, con una edición limitada del famoso modelo que se caracteriza por su motor deportivo, su chasis derivado de las Superbike, el manillar ancho y su estilo naked, que a pesar de haber evolucionado bastante desde su lanzamiento en 1993, se ha mantenido fiel al concepto original, convirtiéndose en una de las motos de Ducati más queridas por los fanáticos de la firma.
Con el primer vistazo es imposible no notar su librea tricolor 30th Anniversary, inspirada en las Monster más deportivas del pasado, esta decoración celebra el concepto Made In Italy, está adornada con dorado en las llantas, que fueron especialmente fabricadas para este modelo, mismo color que también vemos en la horquilla Ohlins NIX30.
Otros elementos distintivos son el asiento adornado con el logotipo de 30 años bordado y la animación dedicada del tablero al encender. Asimismo, vemos una placa en la abrazadera superior con el nombre del modelo y número. Cabe destacar que solo se fabricarán 500 unidades de este exclusivo modelo. Además, está equipada con componentes que mejoran sus cualidades dinámicas y reducen su peso a 184 kg (4 kilos menos que el modelo estándar).
Presume el motor Testastretta 11, un bicilíndrico de 4 válvulas refrigerado por líquido con distribución desmodrómica y 11 Hp. La suspensión Ohlins totalmente ajustable cuenta con una horquilla que es 0.6 kg más ligera, que aumenta la distancia al suelo y el ángulo de inclinación, esto se complementa con un amortiguador de dirección regulable.
El sistema de frenado incorpora pinzas delanteras Brembo Stylema y bridas de aluminio para los discos de freno delanteros de 320 mm, todas estas piezas también más ligeras que en la versión estándar. La electrónica incluye ABS Cornering, Ducati Traction Control y Ducati Wheelie Control, todos ajustables. También posee Launch Control, y una batería de litio que contribuye a la reducción del peso.
Cuenta con tres modos de manejo: Sport, Road y Wet, que permiten moldear el carácter de la Monster según los gustos y necesidades del piloto. Todo esto se gestiona fácilmente a través de los mandos del manillar y del salpicadero TFT a color de 4.3”, con gráficos de carreras que recuerdan a los de la Panigale V4, con un gran cuentarrevoluciones y una información muy completa en el lado izquierdo, incluida la marcha engranada.
