Honda ha celebrado una rueda de prensa mundial en Japón, en donde ha presentado sus proyectos a largo plazo en lo referente a las motocicletas eléctricas. Además de anunciar varios nuevos modelos cero emisiones, también reducirá el coste de los mismos hasta en un 50% y se extenderán al segmento de las Superbikes y el Off-road.
Katsushi Inoue, Senior Managing Executive Officer y Chief Officer a cargo de las Operaciones de Desarrollo de Negocio de Electrificación; y Daiki Mihara, Chief de la Unidad de Desarrollo de Negocio de Electrificación de Motocicletas y Productos Eléctricos, fueron los encargados de exponer la planificación que seguirá el fabricante japonés durante la próxima década.
El objetivo global de ventas anuales de motocicletas eléctricas Honda para 2030 se ha fijado en 4 millones de unidades y se planea introducir 30 modelos eléctricos en todo el mundo para el mismo año. Actualmente, la firma del ala dorada ya vende tres modelos, incluyendo la Honda Cub e (comercializada en China) y el scooter eléctrico Honda EM1 e (en Japón y Europa). Para 2024 introducirá un nuevo modelo basado en el Honda SC e: Concept, al que seguirán otros orientados a la recreación y modelos enchufables en 2025.
Honda también ampliará la gama eléctrica a otros segmentos como superdeportivas, naked, Off-road, infantiles y ATV. Recordemos que la Honda CR Electric Proto debutó en el Campeonato Japonés de MX (IA-1) de la mano de Trey Canard junto con las motos de 450cc, con un segundo lugar en entrenos y a menos de 1 segundo de la vuelta rápida, datos que resultan muy alentadores para el futuro eléctrico Off-road. La batería, la unidad de potencia y el chasis de las motocicletas eléctricas están modularizados y combinando dichos módulos, se pueden desarrollar una amplia gama de variaciones.
La conectividad avanzada permitirá actualizaciones de software posteriores a la compra, incluyendo nuevas funciones a través de OTA (over-the-air) u otros formatos. Además, Honda seguirá evolucionando el servicio de conectividad Honda RoadSync y equipará sus modelos 2024 con un sistema IVI que incluye función de navegación basada en sugerencias, utilizando la información recopilada y proporcionará a los clientes datos como la ubicación de las estaciones de carga.
En los modelos 2026 Honda instalará una unidad de control telemático (TCU). Los datos obtenidos para comprender las necesidades de los clientes basándose en los datos de cómo se están utilizando esas motocicletas. Además de las baterías ternarias de iones de litio utilizadas en los modelos actuales, Honda empleará baterías de ferrofosfato de litio (LFP) en 2025. Adoptando a largo plazo baterías de alta densidad energética, con el objetivo de llegar a las de estado sólido.
Para 2023, Honda buscará reducir el coste de las motos eléctricas terminadas en un 50% en comparación con el coste de los modelos eléctricos actuales alimentados por baterías intercambiables. Para ello, adoptará modelos enchufables, optimizará las celdas de las baterías, aumentará la eficiencia de la adquisición y producción mediante la adopción de módulos comunes y aumentará la eficiencia de la producción a través de diversas medidas, como la construcción de fábricas dedicadas a la producción de modelos eléctricos a partir de 2027.